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La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días continúa monitoreando muy de cerca la evolución de la pandemia por COVID-19 en México y el mundo.
Para la Iglesia de Jesucristo es de suma importancia la salud y seguridad de sus misioneros. La Iglesia continúa adaptándose a las condiciones constantes de cambio que se están tomado en nuestro país y en todo el mundo respecto a la pandemia.
Ante ello, la Presidencia de Área de la Iglesia de Jesucristo en México informa que todos los misioneros extranjeros que actualmente prestan servicio en México regresarán a sus países de origen. Esta transición comenzará de inmediato y de manera gradual, de acuerdo con las restricciones de viaje de cada país.
Se dará prioridad de viaje a los misioneros con problemas crónicos de salud y a los misioneros mayores. Debido a la gran cantidad de misioneros extranjeros que sirven en México y con las restricciones de viaje actuales, se anticipa que este proceso puede tomar algunas semanas en realizarse.
Los misioneros que regresan a su país de origen pasarán por un período de autoaislamiento de 14 días, siguiendo las instrucciones de la Organización Mundial de la Salud y de sus autoridades locales; una vez completado este período podrán ser asignados a prestar servicio misional dentro de su país, según las condiciones locales.
Misioneros en México
Comenzando esta semana, todos los misioneros en México dejarán de salir a las calles a predicar el Evangelio y se les ha pedido permanecer resguardados en cuarentena. A todos ellos se les ha proporcionado suficientes alimentos y víveres que les permitirá afrontar la contingencia de una manera cómoda y segura en sus departamentos.
Estamos agradecidos por el servicio fiel que nuestros misioneros prestan y por los sacrificios que hacen para hacer una pausa en su vida por dos años para prestar servicio misional.
Creemos que al hacer estos ajustes podemos ayudar a quienes trabajan para frenar la propagación y el impacto de la pandemia que afecta a nuestro país y al mundo. Estamos infinitamente agradecidos con cada una de las personas que laboran desde diversos ámbitos, incluyendo autoridades del gobierno, para contrarrestar el COVID-19 y oramos por ellos y sus familias.
