En atención a las preguntas de medios de comunicación sobre el coronavirus, Daniel Woodruff, vocero de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días, emitió la siguiente declaración:
Si bien la Iglesia no realiza trabajo misional en China continental (solo en Honh Kong y Macao) hay más de 67,000 misioneros sirviendo en todo el mundo y su salud y seguridad es nuestra principal prioridad. Estamos monitoreando de cerca la situación sobre el brote del coronavirus y estamos en contacto regular con profesionales médicos y expertos en este tema. Estamos siguiendo las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud, los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades y las autoridades locales de todo el mundo y estamos listos para hacer los ajustes necesarios. Se distribuye información a los líderes misionales y a misioneros que los ayudará a tomar medidas para protegerse contra las enfermedades respiratorias. A medida que se comunican semanalmente con sus familias, los padres de los misioneros deben alentarlos a seguir prácticas estándar para mantenerse saludables y protegerse contra las enfermedades.